Este verano papá dijo que podíamos ir unos días a Portugal
con los abuelos. El viaje fue muy largo. Paramos a comer en Chaves, y después de
una buena comilona directos al hotel.
El hotel muy bonito y lujoso y las habitaciones muy grandes
y chulas.
En Braga había mucha gente. Nos encantó, pero era de noche y
se veía muy oscuro así que decidimos ir otra vez para verlo bien.
El segundo día fuimos al Bom Jesus. Dimos un paseo. Vimos
un montón de cosas: cuevas, jardines, el funicular y por último la basílica.
Luego a comer al hotel y después a
Barcelos la tierra de los gallos de Portugal.
El tercer día fuimos a Viana Do Castelo. Vimos una basílica
que nos llamó la atención había 4 bodas y ese es el único defecto. También vimos una ría portuguesa y muchas cosas más, después a Ponte
Da Lima.
Había unos romanos en la orilla y al otro lado el centurión
y luego a cruzar el Puente De Lima, me encantó. Sonaba música clásica en las farolas.
El cuarto día fuimos a Braga: vimos jardines de flores, fuentes,
iglesias…
Luego a Guimaraes. Había una iglesia, un
castillo y un desfile de flores.
El quinto día fuimos a Porto yo le llamo la Venecia
portuguesa, porque tiene calles estrechas a las orillas del río Duero. Me encantó y recomiendo a la gente que vaya.
Bueno ya de vuelta a casa y a disfrutar de las vacaciones.